Año de lanzamiento: Opium original 1977,
la adaptación actual en 2009
Perfumista: Jean-Louis Sieuzac y Jean
Amic (1977). Antoine Mansondieu para la versión 2009.
Familia: Oriental opulento.
Principales notas (...o a qué huele en
mi): la fórmula del 77; canela, clavo, clavel un dejo láctico a leche de coco y
notas animálicas dulces. La fórmula del 2009 a clavel y jazmín, especies,
vainilla y benjuí.
Usos: especiales y en días fríos...los
días ideales son aquellos en que se necesite un abrazo potente para entrar en
calor.
Duración y estela: el del 77...enorme
mucho más de lo que se pueda pensar, se manifiesta formando un aura fragante
alrededor y dura por sobre las diez horas, siendo muy potente las primeras
tres. El actual potente con sobre aplicaciones y moderada con un par de spray;
duración seis horas.
Una leyenda viviente, opulenta y
grandiosa en todos los sentidos. Opium aturde, arroba y sumerge al usuario en
un sueño profundo por mundos desconocidos;
la versión original poseía una potencia narcótica de la que no se podía
escapar…como la droga.
Hablar sobre este maravilloso perfume es
un ejercicio construido en base a la nostalgia por la antigua perfumería de
lujo que hoy está en vías de extinción. El Opium real, el de la fórmula de los
mil y un ingredientes, es hoy casi imposible de encontrar; su nombre icónico se
pierde en las decenas de flanckers
sacados por L’ oreal para colgarse de su fama: Belles, Vapours, Flour de Chine,
Black y un nuevo Opium 2009 que busca
revelarse como la quinta esencia del lujo barroco heredado del jugo oriental de
1977 y que, sin embargo, no son más que eso, experimentos desesperados de
colgarse del que otrora fue el perfume que, de mejor manera, representó la
decadencia de los 70, la experimentación sexual y drogadicta de una generación
hedonista, profundamente materialista y que cultivaba sus cuerpos al ritmo del
disco.
Aún cuando los efluvios de Opium disparan
el imaginario colectivo en imágenes de cortes imperiales y lujo excesivo, mis
recuerdos de esta fragancia se asocian a
los primeros perfumes de la infancia; este oriental era uno de los
perfumes favoritos de mi abuela y reinaba desde su peinador dentro de un frasco
rojo de borla negra y tapón de cristal. La habitación de mi abuela estaba
inundada con su aroma a la China imperial: especies ambaradas, sedas
brillantes, oro y jade.
En mi mente de niño la habitación de mi
abuela era la cueva de Alí Babá o la corte imperial del gran Khan; un lugar
secreto donde guardaba sus joyas y los frascos de sus perfumes que, obviamente,
era lo que más me atraía. Cuando destapaba Opium y acercaba mi nariz, se
revelaban ante mi los viajes de Marco Polo por Katai, lugares exóticos llenos
de aventuras puesto que, en esos instantes mágicos, yo era un explorador que
recorría tierras exóticas…y esa ensoñación las provocaba Opium.
Poseo una pequeña muestra de alrededor
del 2000, tal vez un poco antes, una miniatura de 4 ml de Eau de Toiletteque
solo destapo para oler, y en base a eso y a la necesidad de reencontrarme con
los antiguos momentos felices, es que escribiré estas notas y de paso
desmitificar la aparición del nuevo Opium 2009 que, dicho sea de paso, no es
susceptible de comparación alguna puesto que es tan distinto a su predecesor y
a la vez, está tan bien construido que
debería poseer su propio nombre y así, ser salvado de las nefastas comparaciones.
La versión antigua (aclaración a parte:
la versión que poseo ya se encuentra reformulada, es imposible pensar que un
perfume en 25 años no haya sido adaptado; en última instancia debido a la
escasez de componentes o a cambios en las cosechas de las materias primas. Aún
así, es la fórmula original), posee una profundidad impensada en la versión del
2009 y una duración que la convierten en un monstruo del que no se puede
escapar. Esta absolutamente facetada en sus notas, las de salida duran
eternamente en la piel y la fragancia solo se revela en su parte más robusta,
después de horas de aplicado.
Esta versión original del 77, se
caracteriza por un clavo potente y embriagador al que se le han añadido clavel,
canela, mirra, un toque ligeramente láctico y un punto cítrico y luego incienso
y humo fragante de especies quemadas. Este Opium es narcótico y balsámico,
profundamente potente y, al igual que LOU LOU (antes de las reformulaciones que
están matando a la perfumería), es MÁS: más en todos sus sentidos, más potente,
más oriental, más mágico, más único, más lleno de ingredientes que le dan más
facetas que muchos perfumes que he tenido la suerte de probar. Es picante,
andrógino, sexual, soporífero y sinestésico, posee un punto, entre el corazón y
la base, en el que Opium puede ser saboreado,
masticado y tragado para formar parte nuestro. Podría pasar horas recordando y
llenando líneas de elementos que se entrelazan con mi relación con esta
fragancia; solo nombrarla me llena de emoción.
Una estructura potente que se traduce en
un perfume con personalidad arrolladora, requería de un usuario que lo
permitiese vivir, lamentablemente Opium de 1976 es hoy solo un recuerdo....
El nuevo Opium de 2009 logra capturar
algo de su espíritu, pero no puede competir con la belleza de amazona de la original,
es diferente, huele distinto pero se parece, sin embargo, le falta la opulencia desmedida, el lujo
exótico, el barroquismo y la oscuridad medio lujuriosa de su predecesora pero
no hay que ser brutalmente cruel con esta nueva versión ya que es por sí mismo
un excelente oriental balsámico, lleno de elementos cálidos y potentes…su único
pecado a sido llamarse igual que un monstruo que es imposible de imitar.
Seamos claros en un punto, Opium original
no tenía cabida en estos tiempos de histeria colectiva; su muerte era cuestión
de tiempo ya que su cantidad de ingredientes, muchos de ellos de uso
prohibido, resultaban inviables de ser
utilizados, no solo desde el punto de vista de la economía, sino más bien de las
tendencias. Esta nueva fragancia de 2009 es una buena adaptación de lo que es
un oriental en la actualidad, sigue siendo balsámica inciensada y especiado en
demasía, dulce y leñosamente cálido es una excelente adaptación para las nuevas
generaciones; insisto en un punto, sería perfecto si no tuviese el nombre que
posee.
En la versión actual no hay clavo y
canela, el clavel a sido rebajado a la
mínima expresión y su presencia potente se ha reemplazado por un jazmín lactónico que le otorga un punto
cremoso, extraño pero atrayente. Se han
suprimido el almizcle, el castoreo y el bálsamo de Tolú, que le
daban su aspecto animal-sexual y se ha introducido una nota de vainilla dulce,
benjuí y pachulí que le dan un aspecto a licor ambarado.
imagen extraída de YSL beuté |
Este Opium 2009 es un oriental
opulentamente bello y especiadamente maravilloso, caliente, abrazador y, por
sobre todo, moderno, transformándose en
una buena adaptación a los tiempos actuales donde el bello jugo tradicional no
tiene cabida. Es andrógino, potente y
tan oscuro como lo fue el del 1977, sin embargo, su nombre nunca lo
dejará volar por si solo...
Hay que darle una oportunidad; yo conocí
el vintage y amé su aroma y en honor a eso estoy aprendiendo a querer el nuevo
jugo sin compararlo con el anterior que ya no existe… solo trato de no
reconocer su nombre cuando me lo aplico.
Me ha encantando Coke!!! Excelente :D
ResponderEliminar- Nayeli
Gracias Nayeli, por las lecturas y tus bellas palabras.
EliminarMuy buena reseña, llena de imágenes, pero también plena de aromas y hasta de "sabores" del mítico Opium, que he tenido la dicha de disfrutar. Aún me queda un poquito en una versión no demasiado antigua, pero que conserva la potencia también de las últimas ediciones. Una "obra maestra" de la perfumería, lejos de las más logradas y exóticas. No sé si hoy, las jovencitas, la comprenderían...Gracias! Graciela
ResponderEliminarGraciela...te agradezco mucho el tiempo en leer. Opium, como toda la perfumería antigua es un gusto adquirido.
EliminarMuy evocativo...
ResponderEliminarSolo tuve el nuevo de 2009, pero qué ganas de probar el original y llenarse de esas facetas y opulencia desmedida...
Buenísima reseña...
Tom in Blue
Se me borró el post anterior...pero gracias por la poesía. Espero la reseña de Aromatics Elixir...después de tu estreno, cuando la vida tenga calma otra vez.
EliminarJorge estaba esperando la revisión de esta joya...y al igual que tú me emociona y produce una sonrisa en mi rostro. Las versiones vintages lo tienen todo. Nunca me ha preocupado que sea clasificado como "perfume femenino", para mí es una potencia comparable con Polo, Antaeus, Lapidus, Kouros, etc. y lo ocupo regularmente. Una información extra: existen varias versiones vintages, y como soy un purista y un obsesivo de los vintages (codigos de barras, fabricación, numero de serie, años exactos, etc, etc) he tenido la suerte de probar todas las versiones desde 1977 hasta la actual. La primera-primerísima versión fue entre 1977 a 1980 y venía con el spray integrado en la zona de la tapa...y ha sido la versión más salvaje y animálico ¿por qué? por que poseía almizcle natural y sándalo de mysore natural, a eso agregale castóreo de los 70'. La obra maestra en su fórmula original. Tuve la oportunidad de probar esta versión unas 3 veces pero nunca pude comprarla. Lo que sí tengo es una botella de 1984 (lo fabricaba Charles the Ritz hasta 1986) y tengo lo que se conoce como una versión mixta (terminos solo entendidos por otros obsesivos como yo je,je) es decir una caja antes de 1986 pero con botella posterior, la mía es de 1991 ( en esta época ya lo fabricaba Yves Saint Laurent Parfums Corp.. Lo fabricó bajo este logotipo entre 1986 y 1992. Estas 2 botellas son fantásticas y recuerdos vivientes de una era dorada de la perfumería
ResponderEliminarSé que todo es un poco complejo, pero la historia de Opium para un fanático como yo esta llena de "detalles importantes". Personalmente pienso que Opium hizo muy buenas formulas hasta el año 2002, año en que cambio su diseño de caja y botella (estéticamente el diseño es más plano, no tan barroco).
También hay versiones Parfum, Eau de Parfum, que complican aún más las cosas...pero eso dejemoslo a futuro
Felicidades por la reseña, le hace justicia a la versión vintage y eso me agrada.
Disculpen lo largo del comentario.
Saludos
Victor
Wow Victor, gracias por la historia...al hacer este post investigue un poco en riderofthelostcent. Un blog muy ilustrativo sobre las etapas de los vintages. Lamentablemente no se la fecha exacta de mi botella (al ser pequeña no tiene número de serie); la compre el 2003 pero sé que debe ser anterior por la caja en la que venía (rojo y azul...y que perdí en alguna mudanza)....Insisto, muchas gracias por tu comentario al igual que tú, mi historia con Opium comienza desde muy pequeño. Un gran abrazo
EliminarGenial la reseña!
ResponderEliminarSin saberlo recordaba Opium como el mejor perfume que he olido jamás, y es que una amiga de mi abuela lo usaba en fiestas familiares, era tan exquisito que todas mis tías le pedían perfume y la casa entera terminaba oliendo a incienso.
yo no recordaba el nombre, solo el olor
Una vez una profesora tenía ese olor y le pregunté que perfume usaba, Opium me dijo.
pretendía comprarlo pero al olerlo me arrepentí, no era para mi y tampoco era el mismo olor :(
Genial la reseña!
ResponderEliminarSin saberlo recordaba Opium como el mejor perfume que he olido jamás, y es que una amiga de mi abuela lo usaba en fiestas familiares, era tan exquisito que todas mis tías le pedían perfume y la casa entera terminaba oliendo a incienso.
yo no recordaba el nombre, solo el olor
Una vez una profesora tenía ese olor y le pregunté que perfume usaba, Opium me dijo.
pretendía comprarlo pero al olerlo me arrepentí, no era para mi y tampoco era el mismo olor :(
Hola Dani, gracias por leerme. Efectivamente el monstruo ha sido domado, sin embargo, Opium sigue siendo un excelente perfume que escapa de los cánones actuales de "oler bien". Considero que este nuevo Opium ha sido demasiado vapuleado por llevar el nombre que lleva... Y su valía como oriental opulento está por demás, demostrada.
EliminarOpium, al igual que a ti, también es un perfume que ha marcado mi vida...amo el antiguo y he aprendido a querer también a este nuevo; sólo trato de desviar la mirada del nombre...y así no sentir tanta nostalgia.
La reseña excelente, igual siempre pensé que podrían haber dejado una parte de la linea para las incondicionales como yo. Tenemos la misma opinión por ejemplo cuando no encontraba mi favorito probé con OPERA de Nina Ricci, creo que era, me enamoró tambien porque me evocó al Opium. No deberían haberle puesto el mismo nombre para no comparar.
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